Joaquín Sorolla y Bastida es un gran pintor valenciano, impresionista y luminista que nació en Valencia en 1863 y murió en Madrid en 1923.

Uno de los más genuinos pintores impresionistas y además, de una originalidad en la pincelada gruesa que los demás impresionistas no tienen, además de la luminosidad estridente de sus óleos que nos recuerdan la alegría, el júbilo y la anticipación de la que Lacan habla cuando se refiere al Estadío del Espejo, fase en la que el niño asume el yo, fase que se caracteriza , como hemos dicho ya en ésta página por una primera etapa de inmadurez neuronal del cuerpo donde el niño no se reconoce en el espejo hasta que entre los 6 meses y el año y medio cuando su madre le muestra su imagen , este asume la imagen jubilosamente en medio del gran brillo del espejo que es el brillo del ego y que anticipa la inmadurez neuronal del cuerpo ya que el niño aún no puede articular todos sus movimientos y la imagen especular anticipa la fase donde podrá hacerlo.

Este es el brillo que caracteriza, junto a su luminosidad la pintura de Sorolla.

En sus primeros tiempos estudió pintura en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos, en su ciudad natal.

En 1885 marchó a Roma,donde residió durante aproximadamente 4 años, sin contar algunos viajes a Paris, Madrid y Valencia.

A su vuelta a España (1889), se traslada a vivir a Madrid. En 1895 obtiene una medalla en la Exposición Nacional, con su cuadro «Y aún dicen que el pescado es caro».

Participó en varios certámenes tanto en España como en el extranjero en las cuales obtuvo siempre galardones (Paris, Venecia, Viena, Berlín, Munich, Londres, Nueva York, Boston).

Realizó para la Hispanic Society de Nueva York una serie de retratos de personajes ilustres, que le dieron una justificada fama, encargándosele posteriormente la decoración de la biblioteca de ésta institución, con temas representativos de las diversas regiones españolas, obra que concluyó en 1919.

Fue elegido miembro de la Real Academia de San Fernando en 1914.

Su obra es numerosísima, conservándose gran parte en el Museo que fue su casa, en Madrid, allí pudimos apreciarlo y disfrutarlo como el gran pintor impresionista de la luz.

Su luz es vibrante,viva y viene despúes de una etapa de crítica social.

Su luminosidad y color son sencillamente espléndidos, deslumbrantes , haciéndolo destacar dentro del impresionismo.

Pin It on Pinterest