Gabriel Daneri nació en Buenos Aires en 1956, es actor, profesor, autor y productor teatral.

Tiene varias importantes obras en su haber y ha recibido varios premios, algunas de sus obras son las de un maestro.

Se recibió de actor en la Escuela Nacional de Arte Dramático de Buenos Aires y no ha parado de trabajar desde entonces.

Ahora, es lo que vamos a tomar, se luce con un poema suyo extraordinario, un ejemplo de dramatismo y sutileza, el poema dice así:

«Aura»

Cuando sea el fantasma de mi propia vida
No me iré
Me quedaré, observando
como escapan los sueños de mis idas
El genio de mis uñas
Haré economía de palabras bonitas
Miraré un espejo: que poco vieron
El alma, que devora, pensará que sólo fuiste un instante

Merecería más, diré
No tendrán piedad:
Buscarán la manera de acatarme
Los veo Los veré
Habrá insomnio,
destiñendo policromas
tomaré aire hacia lo incierto
No estarán Ellos lo saben
Ese tiempo será oro

Obedecí, escondiendomé
Algo cotidiano
Olvidaré, el olvido
No me iré
Habrá una mueca de pena
a mi visión de niño.

El poema es muy misterioso y de una gran belleza y síntesis, está escrito desde la modernidad con verso libre.

Creemos poder asociarlo con lo que Freud dice del desamparo en el ser humano: todos nacemos desamparados y de vez en cuando en nuestras vidas ese desamparo vuelve a hacerse sentir, estamos desamparados, de ésto se trata en el poema. Sólo la presencia de los padres, especialmente de la madre, son para Freud un remedio para ese desamparo inicial.

Sobre el tema del desamparo humano habla Freud en «El Proyecto de una psicología para neurólogos», que recomendamos leer.

Por otra parte el poema tiene otras lecturas, que hemos dejado de lado aquí.

Pero felicitamos a Gabriel Daneri, gran autor, por su incursión tan acertada en la poesía.