En su libro “El primer año de vida del niño”, el psicoanalista y gran investigador René Spitz, fundamenta para la ciencia, como la ausencia de la madre durante el 1º año de vida del niño conduce al hospitalismo o a la depresión anaclítica (cuando la ausencia no ha sido total).
Estudió a los niños depositados en entidades hospitalarias u hospicios y observó detenidamente, cómo al no tener una figura adulta estable que los cuide y mime, los niños caen en el retraso psicomotor, del lenguaje, retardo del desarrollo corporal, de la habilidad manual, etc.
Llegó a la conclusión que una figura como la madre o una sustituta estable con la que entablar un fuerte lazo afectivo es determinante para el desarrollo tanto del psiquismo como del cuerpo.
Algunos niños, abandonados en guarderías u hospicios llegaban hasta el marasmo o hasta la muerte, tal es la seriedad de éste asunto.
Y esto tiene que ver conque en estos lugares, los cuidados son administrados en forma anónima, no por una persona diferenciada y diferenciable a quien poder amar y sentirse amado.
Los efectos del hospitalismo, tienen consecuencias duraderas o incluso irreversibles; la depresión anaclítica sobreviene cuando un niño ha tenido a su madre y en los primeros meses la pierde y pasa a una institución.
Esto prueba, es un fundamento de la teoría psicoanalítica, que la relación con la madre y no sólo la genética, sino la relación afectiva-psíquica con la madre es esencial para el crecimiento normal, para que se constituya la personalidad, y un sujeto, que no es tratado como un objeto que pasa de mano en mano, en forma anónima, como en los hospicios.
La depresión anáclitica, puede remontarse si el niño vuelve con su madre, pero el hospitalismo deriva en el marasmo y en la muerte.
La falta de amor materno, puede conducir a la muerte del sujeto.
Nos damos cuenta, como ya lo había hecho notar Freud, que la biología y la genética no pueden explicar todo el desarrollo de la personalidad, que este desarrollo depende de las relaciones afectivas de los niños con sus padres.
Recomendamos la lectura de este libro, por ser un hallazgo de las ciencias conjeturales: “El primer año de vida del niño” y, también, del mismo autor “No y Si”, realmente un aporte fundamental a la teoría psicoanalítica.
Otro de los fundamentos del psicoanalísis, que no desarrollaremos aquí, son los experimentos del Dr. Charcot con la hipnosis, de donde Freud, que estudió con él en Paris, dedujo la existencia del sistema inconsciente de ideas, el descubrimiento del inconsciente freudiano, viene de la mano de los resultados de la Transferencia que el paciente establece con el hipnotizador.
Por último, el otro fundamento, son los éxitos de las terapias psicoanalíticas tanto con niños, como con adolescentes y adultos.
Es importante recordar los fundamentos del psicoanálisis, en especial para quienes recién se aproximan a éste. René Spitz es un eximio investigador.
Leer a René Spitz es un hallazgo y un placer, es un investigador excelente y , es cierto, dio mucho fundamento al psicoanálisis, sus investigaciones sobre el hospitalismo no dejan lugar a dudas de que la formación de la personalidad no depende solo de la genética.
La obra de René Spitz es excelente, a no perderselá, en particular los que desconfían de los fundamentos del psiconálisis.
El ejemplo del hospitalismo constituye un fundamento para la teoría psicoanalítica del maternaje, la función materna es indispensable, la ejerza la madre o una sustituta, pero es básico un vínculo de afecto estable para el desarrollo del ser humano. Muy bueno recordarlo.
Original, excelente artículo !!!
Un artículo que despierta mucho interés por leer sobre los fundamentos del psicoanálisis, sobre todo a René Spitz. Muy recomendable.
El caso del hospitalismo es tan dramático como ilustrativo de lo que significa la carencia materna; la teoría descubierta por Spitz no deja lugar a dudas sobre el hecho de que la genética y la biología no alcanzan para explicar la constitución de la subjetividad.
Con Freud, Melanie Klein, Lacan, y autores excelentes como Spitz, sabemos que la falta de la madre estable o una sustituta equivalente, producen estos retrasos en el desarrollo. La biología no alcanza para explicar la formación de la personalidad y el psiquismo.
Sin duda un comentario indispensable en éstas épocas de tanta confusión entre el papel de la genética, la biología y la medicina en el desarrollo de la personalidad.
Me parece indispensable la lectura de un gran pensador como es Spitz.
El hospitalismo, un tema muy poco hablado, que no tratado por especialistas. Quizas porque choca con corrientes que investigan las ausencias de padres y como resolver estas cuestiones, por ejemplo, en guerras o catástrofes naturales.
Un autor fundamental para el análisis René Spitz, me alegro de que lo hayas recordado. Y también, un acierto el debate sobre los fundamentos del psicoanálisis para evitar confusiones innecesarias.