W. C. Williams (EE.UU.1883-1963) está considerado como el más importante poeta norteamericano después de Walt Whitman.

Muy pocos poetas tienen un verso tan depurado como el suyo y ha demostrado que los elementos poéticos pueden encontrarse en cualquier parte.

Nació en Nueva Jersey, era médico, apegado a la vida hogareña y gran poeta.

Póstumamente en 1963 ganó el premio Pulitzer.

Hemos elegido un bello y profundo poema suyo para transcribir y analizar aquí, dice así:

 

 

 

A modo de canción

 

 

Espere la víbora bajo

la maleza

y sea de palabras

la escritura, lenta y rauda, pronta

al ataque, paciente en la espera,

siempre en vela.

 

-para por la metáfora reconciliar

las gentes y las piedras.

Crea. ( Ideas, no,

salvo en cosas.) ¡Inventa!

Saxígrafa es mi flor que parte

las rocas.

 

 

Es un poema bellísimo, profundo y de una enorme potencia donde declara su posición ante la poesía y su parecer frente a la palabra: para él la palabra, como para el psicoanalista ”parte las rocas”.

 

Por la palabra abrimos caminos insospechados tanto en poesía como en psicoanálisis, producimos efectos terapéuticos, hacemos pensar ( la poesía), sublimamos, creamos, hacemos funcionar la fantasía hacia el camino de lo terapéutico.

 

Freud es quien descubre que la palabra es profundamente eficaz y terapéutica, así como que la palabra puede enfermar.

 

Para Lacan hay palabra plena y palabra vacía: la palabra vacía es la del lenguaje coloquial y corriente, la palabra plena se produce por ejemplo en el chiste, subvirtiendo el sentido, en el lapsus linguae, en al acto fallido, etc; es una palabra que genera y relanza el sentido.

 

En este poema de Williams la alusión es a un relanzamiento del sentido: “parte las rocas” ( aclaremos que saxígrafa viene de las rocas que puede haber en los riñones, es una palabra médica, ya que el autor era médico).

 

Recomendamos leer a fondo a este gran poeta norteamericano, porque encontraremos un nuevo tipo de poesía, que después fue tomada como ejemplo.